Friday Blues [Banquetazo a tres tiempos]

Bueno, damas y caballeros, ahora vengo aqui, a las dos con veinte de la tarde del sabado, recien levantado, a pavonearme de las utilidades encantadoras de un viernes por la tarde con las muestras de Los Blues Brothers y B.B. King al limite de la indecencia blusera.

El motivo de mi extremadamente tardío despertar a estas horas, se debe facilmente a, como dicen en la televisión, una buena alimentacion y un reposo placentero.

Ahora, en el Sombrero Gourmet, vengo a ustedes con una selección de tres tiempos de compartirse con alguien. No es esta vez cocinar solos, para si mismos o para alguien a tiempo despues. Sino a la par, corriendo con los ingredientes y tratando de finicar la obra en menos de hora y media.

Cocinar con la persona que amas es un distinto modus operandi, y sobretodo, es un encanto. Una caricia al corazón. Es una especie de episodio a futuro, es contemplar una relacion en una pequeña actividad de organizarse, de revisar medidas, de comer juntos sobre la cama y escuchar musica mientras, al final, se amontonan por ahi los platos.

Sin mas que decir, a continuacion vienen las recetas de la semana de un sentón. Ya saben, siempre ando pensando en ustedes los pobres e indulgentes.

Las primeras dos recetas son patrocinadas por La Novia. Quien fue la que elaboró aquellos platillos.

Suplementos y postre son patrocinados... pos por yo merengues. Claro que si.

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1er Tiempo

Pescado asado
(Dos porciones)


Ingredientes:

* Dos a tres filetes de pescado (uno y medio pa' cada uno)

* Orégano seco

* Sal de ajo

* Hartos limones

* Sal y pimienta al gusto

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Oki, para el primer plato, solo usando la sugestión y la deducción (que me tuve que salir a buscar unos ultimos ingredientes y a rellenar garrafones y tal) creo en que la novia, para empezar, tuvo que lavar bien los filetes de pescado.

Se calienta la sarten y los pescados se van condimentando antes de echarse al fuego: pimienta negra molida, oregano y sal. El limon es otro caso, que enseguida aclararé.

Cuando se marina la carne, el pollo o pescado con limón, se recomienda antes hacer una de dos cosas:

1. Hacerlo casi hasta el final, pues, como me decía la novia, el limón se va oxidando con el paso de las horas y al final el sabor del limon en la carne, pollo o pescado deja de tener el sabor que uno esperaba.

2. No marinarse, sino que antes de echarse al fuego empapar el trozo con limón. Acto seguido echarse al fuego donde se procederá a echarse mas limon mientras se va cociendo, lo que agarrará el jugo con mayor concentración y no perderá sus propiedades limonisticas. ¿Eda?

Bueno, como no habia tiempo de marinación se escogió la segunda opción. Mientras se iba asando el pescadín con el limon sobre la sartén, se le fue echando unas espolvoreaditas de sal de ajo. Om nom nom. Un condimento que se utiliza mucho en la comida italiana, y que no puede faltar en sus especieros.

La cocción en general de los filetes de pescado no duran mas allá de diez minutos. Y es demasiado decir ello.

Se sirve calientito y con un tamal de mole de pueblo. Ya dije.

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2do tiempo

Spaguetti con huevo
(Dos porciones)


Ingredientes:

* Spaguetti (obviamente)

* 2 Huevos (nunca lo hubieran adivinado)

* Sal al gusto (a la novia no le gustó, matarilerilero)

* Aceite (dos cucharadas, aunque no creo que fuera usado)

Ingredientes para el pan de ajo:

* Pan blanco

* Mantequilla o margarina (usé el segundo, no se cual es la diferencia, carajo)

* Sal de ajo

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Bueno, el segundo plato es muy sencillo pero no deja de estar sabrosón. Inclusive se hizo mientras se preparaba el pescado.

En una olla, como antes habia estado diciendo, se le echó agua y el spaguetti sin hacer dentro de esta. Se puso a fuego y con dos cucharaditas de aceite (aunque nunca vi que ella le pusiera, yo le pongo, pero ella tiene mas experiencia asi que... ¡Haganle caso!)

Se deja hervir, el spaguetti se hace aguadito y cuando ya este suave y comestible (nada de que se me quemó, ni madres) se le echa los dos huevos sobre el agua con la pasta.

Ella dice que debió andarle dando vueltitas al huevo mientras se cocía... pero por causas de fuerza mayor que no se puede contar (ejem, ejem, callen, que les pasará lo mismo) se coció el huevo por si solo sin menearse (igual quedó rico).

Y de igual forma se desprendió en cachitos.

Mientras tanto, para hacer de la comida mas de caché, se hizo pan de ajo. No vamos a ponernos elegantes con los ingredientes originales ni el metodo convencional, no hay dinero ni medios para ello, pero si se puede acercar uno y el resultado es igual de satisfactorio.

No es dificil. Se toma una rebanada de pan, se le unta mantequilla o la margarina y se le espolvorea con sal de ajo.

Se tiene un mejor resultado si se calienta el pan primero con la mantequilla y luego se espolvorea la sal de ajo, pero se necesita un mini hornito, cosa que aun no tengo.

Al final se comió con mucho gusto el spaguetti con sus dos rebanadas de pan de ajo. Muy a la italiana. Molto bello.

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3er tiempo

Pan francés
(Dos porciones)


Ingredientes:

* Cuatro rebanadas de pan blanco (pero creo que es mejor con pan integral)

* Tres huevos

* Canela en polvo

* Margarina o mantequilla, again.

* Leche

* Cajeta, mermelada, chocolate, miel, ustedes eligan.

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Este es un postre muy efectivo y delicioso. Se utiliza mas para desayunos, pero igual es un postre original que gustó mucho esa tarde.

Primero se rompieron los huevos (aunque suene asi de feo) en un plato hondo. Se le agregó la canela en polvo y la leche, siempre batiendo la mezcla para que quedara uniforme.

Se calentó la sartén y se le puso una cucharada grande de mantequilla a derretirse. El juguito de la mantequilla o margarina se le echó a la mezcla de huevos, canela y leche.

Enseguida, con la sarten aun caliente, se le puso un poquito mas de mantequilla.

Aqui viene la parte que se debe ser cuidadosos. El primer pan salió bien gracias a que se remojó por los dos lados bien, y rapidamente se echó a la sartén caliente. El segundo fue un error mio. Se dejó el pan remojandose un rato largo, y cuando se quizo sacar estaba demasiado empapado que se rompió. Ese ya no sirvió.

El tercero se remojó casi por encimita y duró mucho para que se hiciera (hay que andarle volteando las rebanadas sobre la sarten para que no se quemen ¿Capisci?).

Finalemente el cuarto y el ultimo fueron bajo el primero termino, lo que se concluyó la tarea antes de diez minutos.

Se sacaron los panes, se sirvieron en un plato y se les embarró el gusto culposo dulce y sabrosón al antojo. Nosotros usamos cajeta quemada, pero sirve con casi cualquier cosa dulce.

En fin, este banquetazo, en estima de duración, no tardó en hacerse mas de una hora, y el resultado fue exquisito y agradable.

La música de Juan Luis Guerra y Pedro Guerra acompañaron la sazón y fue una linda tarde de viernes.

Considero que cocinar con alguien, como lo fue con ella, ha sido una de las mas agradables experiencias que nadie debe perderse.

Es una forma de unirse mas. Una forma de demostrarse el cariño y el amor uno al otro.

Porque, aunque paresca cliché, una forma de demostrar el amor... es através del estomago.

Al dia siguiente, obviamente por causas de enorme satisfacción gourmetera y culinaria, el sueño se apaciguó hasta muy tarde. Pero que mas da, lo bueno de los sabados son las mañanas largas, los buenos dias de una hermosa dama, y el blues apaciguado a armónica y voces roncas.

Y voilá.