martes, 8 de diciembre de 2009

El mundo segun las paginas


Antes de que arriesgue mi integridad para hablar de la Feria Internacional del Libro, quiero tomarme una entrada para actualizar los diarios de un escritor aburrido.

Como algunos pocos saben, entré a un concurso de cuento SMS y los resultados fueron desepcionantes. Aun y a pesar del nulo limite de participacion por persona, no pude colocarme en ninguno de los primeros lugares y es algo que, al menos por ahorita, me tiene en crisis literaria existencialista.

Parece raro, pero despues de cuatro años uno pensaria que ya habia mejorado. He participado en muchas convocatorias. Julio Verne, Juan Jose Arreola, FEU; he participado en concursos estatales, locales, nacionales y hasta latinoamericanos.

Y pensar que este, un concurso SMS, ni siquiera local, mas bien microscopico, lo haya perdido... es bastante desalentador.

Yo que ya pensaba que sería bueno como un primer paso. Caramba.

Por ahora no estoy escribiendo, pero seguramente retomaré confianza en algunos dias. Y eso espero, porque ya estan aqui las vacaciones y hay que continuar con Los quince viajes de Manuel Solera. Debe ser mi pase de salida.

Maldita sea la crisis literaria existencialista. Ni la crisis de la mediana edad. Chingao.

En otras cosas, ahora es tiempo de un cambio de lectura. Por muchos años estuve enfatizandome en la literatura rusa, en autores como Maximo Gorki, Ivan Turguiniev y el gran Dostoyevski; asi que por ahora cambiaré de estrategia y comenzaré a leerme algo japones.

Primer paso: Murakami.

No estoy muy entusiasmado, despues de algunas cuantas paginas de After Dark, pero reconosco que tiene una frescura y una sencillez agradable. Quien sabe, quizas estaba demasiado emocionado en leer algo de analogías orientales, metaforas espiritistas y demás fabulas obsenas, morbosonas.

Pero vamos, apenas son las primeras paginas y apenas es el primer libro.

Despues sigue Tokyo Blues, del mismo autor, y ya daré veredicto sobre Murakami.

Mientras tanto ya es martes, ya es fin de cuatrimestre y quedan cosillas que arreglar antes de que el estres y la tension me lleven al diablo.

Maldichon.

Salud.

1 comentario:

Ciudadana Herzeleid dijo...

Disculpa si hasta ahora leo sobre tu crisis existencia literaria, pero esas cosas son gajes del oficio. De igual forma he participado en varios concursos de los que solo he obtenido reconocimientos, pero no van más allá. Y ya ni menciono los que son en estilo de SMS, convocatorias por correo electrónico o por cadaveres esquisitos. Es normal que te sientas así, como una cruda, y creeme, por más que quieras nunca mejorarás, y no me hablo de que seas malo, es al contrario, siempre te estarás exigiendo, y estarás lamentándote, pero de eso se trata la escritura, nunca conformarse, siempre moverse. Es bueno ver que eres sincero con esto pues muchos otros escritores lo desadmiten o lo niegan, como si quisieran mantener esa perfección impoluta y se quisieran creer dioses inalcanzables y hacer de lado a los demás¡este también es un oficio de otros, caray! Así que no te dejes dominar por esa angustia. Disfrútala, habla con ella, analízala, pero no te claves en ello y sigue adelante. La verdad, con todo respeto, tu forma de escribir me parecie muy chingona =)