No se si tenga alguna vez justificación el tener por tanto tiempo el blog abandonado. Cuando comencé a escribir en él lo hice pensando en que debía poner todo lo que pasaba en mi vida y después, cuando fuera mas grande y mas viejo, recapitular mirando al pasado todo lo que hice y no hice. Saber en que me equivoqué y en que acerté.
Estando ahora en medio de la escuela de la novia, pensando en miles de cosas que han estado sucediendo, he considerado el continuar el blog y no volver a dejarlo abandonado (debo admitir que el libro de La tregua, de Mario Benedetti también me inspiró la regreso).
Han pasado muchas cosas en seis meses. Lo primero y mas importante es que al entrar a la personalización del blog me salieron miles de cosas extrañas que en mis días no existian. Aunque será cosa de acostumbrarme, creo yo. Poco a poco se parece al facebook pero al menos sigue siendo un recurso distintivo (y no pienso adentrarme a terrenos del tumblr).
Ahora, ya hablando de la vida misma, hace un par de meses que llevo trabajando de maestro en una universidad de las llamadas patito. No es que sean chafas ni mucho menos, pero manejan un plan de estudios algo pobre y carecen de muchas ventajas. Yo, por mi parte, enseño Lectura y Redacción (I y II) y próximamente Literatura (algo que me emociona demasiado).
Enseñar no es difícil. Es incluso mas fácil que atender mesas y trasnochar por trasnochar. Los alumnos son como todos los describen, torpes y poco interesados. Sin embargo, creo que si puedo hacer que uno o dos alumnos por clase se interesen bastante por la materia me daré por bien servido.
Por lo menos ya me han regalado dulces y eso me hace sentir como todo un profesor.
Lo único malo es la paga. Solo voy tres dias a la semana y cuatro horas diarias. 30 pesos por hora. Si, me han dicho que es un sueldo escaso y pobre, pero la experiencia y las posibles recomendaciones para después me ayudarán mucho a encontrar algo mejor.
Ahora, además de estar enseñando, también me encuentro aprendiendo nuevas cosas. Me inscribí en el taller de Redacción en la Casa del Escritor y debo decir que la clase me emociona a sobremanera. Es didáctica, es interesante y el debate o discusión siempre encuentran lugar en las dos horas semanales en que asisto. El maestro tiene una clara idea de lo que enseña y es agradable poder contar con el taller para mejorar mis textos.
Espero que próximamente pueda entrar a nuevos cursos o talleres, para seguir expandiendo mis conocimientos y tener mas para el curriculum.
Hablando de literatura, llevo desde agosto del año pasado ideando, construyendo, investigando y escribiendo una novela negra de suspenso con ligeros tintes de ciencia ficción. Me agrada, la combinación de temas es divertida y siempre que puedo trato de soñar despierto con otras ideas que agregarle y que quitarle. Por ahora está en pausa a causa de la descompostura de la computadora anterior (regresé a lo compacto) pero espero seguir con la novela próximamente.
El título creo haberlo escrito ya con anterioridad, pero si no es así, se los coloco aquí: El último hombre muerto (aunque no es oficial, me he encontrado con varios textos en linea con el mismo título y me da un no-se-que no utilizar algo original).
Sin embargo, mientras espero a componer la otra computadora, estoy escribiendo varios cuentos. Uno de ellos lo colocaré en el blog hermano de este y el otro esta ideado para entrar al VI Concurso de Cuento "Murmullos en el llano". Creo que desde hace un tiempo he tomado el segundo aire y me han entrado intensas ganas de seguir escribiendo. Espero tener la suerte necesaria (y el talento también) para poder ganar el premio (o por lo menos uno de los primeros tres lugares, el que sea).
Por ahora se acerca la hora de salida de la dama por lo que debo retirarme. Seguiré con las buenas nuevas en la próxima entrada y gracias por tenerme la paciencia para mi regreso. Aún queda mucho por contar en lo que venga.
Así que seguiré escribiendo en estos lugares por mucho tiempo mas.
Salud.
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