miércoles, 9 de febrero de 2011
Rebajas de Enero
Ahora que volvemos a las andadas, y tras unas semanas de trabajo y una nueva estabilidad economica posible, es hora de enfatizar los mayores puntos de La vida moderna del Sombre.
Es cierto que no he actualizado con la frecuencia posible, pero es que no es tanto que no haya mucho que contar, sino que, como dice Sabina, ahora que tengo un alma, que no tenia; es dificil enfocarse a escribirle a un diario que es mas bitacora que bloc de notas para asegurar el paso del tiempo.
Sin embargo, es justo y necesario, como misa de domingo, recurrir a las letras de vez en cuando y no dejar abandonado un proyecto de años. Aunque mis lectores sean pocos... son los mejores lectores que pudiera tener.
Algo que me ha estado inquietando desde que entré al Café del artista es la dirección tan frívola con la que se maneja.
Los empleados tienen un caracter amargo, quizas por el hecho de trabajar mas de doce horas diarias y por la dictadura interna de los dueños tan limitantes.
No obstante, extraño las conversaciones desfiguradas con los compañeros. La platica entre mesa y mesa, las reflexiones de la vida misma al caer la tarde y no hay un alma que se detenga a beber una cerveza.
Y las bebidas. ¿Donde está el amor en este lugar? ¿Donde está el amor en la preparación de las bebidas? Todo es tan sistematico, tan rapido, tan insipido.
Con lo que me gusta que las bebidas tomen su tiempo. ¿Que importa realmente como lusca una bebida si no sabe a la dedicación? No es una obra de arte, pero tampoco un refresco de fabricación inmediata.
Que tristeza.
El dinero no es problema. Creo que cien pesos al dia, y una excelente propina al finalizar la jornada valen la pena por las trece horas consecutivas. Pero siento que falta mas. Ese es un bar que podrá tenerlo todo. Musica, comida, bebida y servicio.
Pero no hay ese sentimiento de humanidad.
Pobres, y con lo que podría ser el mejor lugar.
En casa las cosas estan relativamente bien. Ya hay con que distraerse en dias de asedio. Hay comida, y un espacio en blanco que quisiera llenar de cuchitriles seudo-decorativos.
Los dias con la novia han pasado de una tensión momentanea a la misma integridad de siempre. Una rutina sin rutina, La rebaja de Enero que cuenta Sabina en Juez y parte.
Los planes se van realizando y la vida ha dado muchas vueltas ultimamente. Con lo que facilmente para mediados del año o finales del mismo, haya un final de temporada imprecindible. Epico y sublime.
La aventura en pareja es algo que nunca podría haberlo soñado mejor que al estar con ella. La vida a la intemperie no podría estar mejor situada que en este momento.
Aun falta realizarme de modo literato. Aun me falta terminar los sueños que alguna vez soñé. Pero poco a poco este mundo nuevo, la ciudad de las plumas; donde cada mañana y cada noche soppla una brisa fria; donde arremete el silencio tan temprano y es punto de ebullición en horas pico; comienza a cambiarme y engrandecerme.
Y no podría pedir otra cosa.
...Quizas, solo mas amor a las bebidas. Tambien tienen sentimientos.
Salud.
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2 comentarios:
Corazón, te quejas mas que mi madre
=O
¿Esto es queja? Es puro caos nihilista y letrado.
Nada, nada. El blog siempre ha sido un dramaturgo.
Salud.
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